Alquezar Rosado 2011, elaborado con uva Tempranillo y Garnacha pone en escena desde hoy su potencia frutal y su apetecibilidad en estado puro
Bodega Pirineos (Grupo Barbadillo) saca a la venta ALQUEZAR ROSADO 2011 como parte de la vanguardia de los nuevos vinos que van a aparecer en el mercado de esta magnífica añada 2011, poco más de un mes después de iniciada la vendimia. Sin duda una satisfacción para los amantes de este tipo de vinos en los que una chispeante aguja deja paso a unas sensaciones muy agradables en el paladar, fruto de su gran apetecibilidad.
En su edición anterior fueron cerca de 100.000 botellas las que se vendieron a un gran ritmo de consumición. Para esta nueva cosecha se han preparado cerca de 120.000 botellas. Fuera de España este vino está rompiendo moldes en algunos países europeos, motivo por el cual la previsión de ventas es algo mayor para esta cosecha. En cuanto al consumo en España, este vino desde sus inicios hace 11 años ha tenido una gran aceptación entre el consumidor aragonés por lo que representa. Además de ser un excelente vino hace honor a una de las poblaciones más emblemáticas de la provincia de Huesca, a la Villa de Alquezar.
A lo largo de estos años, el resto del consumo nacional ha ido conociendo la evolución de este vino rosado joven convirtiéndose en un referente en los rosado de calidad marcados por su chispeante y suave aguja natural procedente de su propio carbónico de fermentación.
Jesús Astrain, enólogo de Bodega Pirineos explica sobre este vino que “nos planteamos como objetivo un vino de un bello color rosa fresa que contuviese todo el aroma y el dulzor de la fruta madura en sazón. Para ello detuvimos la fermentación de los rosados más golosos para dejar azúcares residuales que nos ayudaran a conseguir un vino de gran apetecibilidad muy fácil de beber. Además, la sensación dulce tiene un delicioso efecto sobre la gama aromática potenciando la percepción de frutas maduras, cerezas, fresas, incluso piruleta y chucherías. La suave aguja de carbónico acompaña a este vino aportando un excelente equilibrio y reforzando su apetecibilidad. Servido frío Alquezar rosado se convierte en un magnífico acompañante de aperitivos, comida italiana, arroces y carnes suaves. Una explosión de fruta embotellada, lista para dar placer”.
