El hotel Barceló Montecastillo ofrece a sus huéspedes una cata privada de vinos Lustau para que conozcan sus variedades Los vinos de Jerez se presentan como la mejor alternativa de estas navidades. Gracias a la gran cantidad de tipos que existen y a su versatilidad en cuanto a aromas y sabores se refiere, se han convertido en los grandes aliados para acompañar los platos más sofisticados en estas fechas. Diciembre 2018. –Desde acompañar un fino o manzanilla con quesos y embutidos hasta elegir un amontillado para maridar con asados, pescados y mariscos, lo cierto es que estos vinos de Jerez son grandes potenciadores del sabor y permiten acompañar gran cantidad de platos, tanto de la cocina tradicional como de la gastronomía más vanguardista e internacional. Para dar a conocer estos vinos y saber con qué maridarlos durante las fiestas navideñas, el hotel Barceló Montecastillo ha diseñado la experiencia Enology Master. Gracias a ella, los enófilos podrán conocer en una cata privada la amplia gama de vinos de Jerez de Lustau que, por su versatilidad, se han convertido en un referente en la coctelería con vino debido a la riqueza de sus colores, su intensidad aromática y su fácil combinación con numerosos menús. Fino y manzanilla: Son vinos secos, ligeros y delicados al paladar que extraen y potencian los sabores de multitud de platos. Estos vinos son ideales para recibir a los invitados junto con un buen jamón, con embutidos ibéricos y quesos suaves, pero también con mariscos, pescados y asados. Amontillado: Estos vinos de acidez equilibrada y exquisita complejidad son capaces de triunfar en múltiples terrenos, aportando su toque personal a una gran variedad de platos. Estas navidades triunfarán acompañando a carnes y asados, consomés y caldos, pescados azules y ahumados, quesos curados, arroces y platos especiados. Oloroso y palo cortado: Al ser vinos potentes con más cuerpo matizan los platos más intensos y potencian el sabor. Es el vino más apropiado para las carnes rojas y la caza y combina perfectamente con guisos o estofados; especialmente con carnes gelatinosas como el rabo de toro o la carrillada. También es excepcional para las setas, así como para los quesos muy curados. Cream: Esta variedad de Jerez tiene un dulzor equilibrado que se prolonga en la boca. Tiene aroma intenso, paladar aterciopelado y mucho cuerpo, por lo que combina perfecto con recetas de toques dulces como la fruta, el roscón o el mazapán y los helados, pero también con el foie gras. Además, podemos servirlo a modo de aperitivo, en un vaso bajo, con hielo y una rodaja de naranja. Moscatel y Pedro Ximénez: Probablemente el Pedro Ximénez es el vino más dulce que podemos encontrar en el mundo. Es un postre en sí mismo, pero combina excepcionalmente con chocolates ligeramente amargos, con los helados o con los quesos azules de gran intensidad. |
