En China, los vinos baratos no se venden
El asesor vinícola John Isacs, que desde hace años vive en China, consideró ayer en Aranda de Duero (Burgos) que los vinos de la Ribera del Duero tienen que aprovechar la oportunidad de introducirse en el mercado asiático, tradicionalmente ligado al buen vino, y que en estos momentos es «el país con mayor crecimiento del PIB del mundo» y el tercer mayor importador y exportador.
Isacs, que participó en la última jornada del II Congreso Internacional Ribera del Duero, abordó en líneas generales los entresijos del mercado chino y señaló el importante crecimiento de las importaciones de vino en 2007 respecto al año anterior, ya que «crecieron un 109 por ciento en volumen y un 138 por ciento en valor».
Además, explicó que existen muchos mercados diferentes en Asia, y se centró en los que más posibilidades presentan: China y Taiwan.
En este sentido, explicó que en ambos lugares «los vinos más caros se venden mejor, por ejemplo un Vega Sicilia, que lo quieren más y más», para ello los vinos tienen que ser buenos, tener puntuaciones muy altas en las guías de vino y buenas referencias en la prensa internacional, precisó.
En China, continuó, los vinos baratos no se venden «porque ya existen allí y dominan el mercado, mientras que en Taiwan no se produce vino». Este último es un mercado más sofisticado, hay madurez, se sabe beber vino mejor que en China e influye en los mercados del mundo.
El neoyorquino, fundador de la revista «EnjoyGourmet», desarrolló la segmentación del mercado y destacó que China y Taiwan coinciden en la importancia y en las posibilidades de los clientes VIP, «los muy VIP», como el mercado más importante al que pertenecen las grandes empresas. Entre las ventajas de este mercado destacó la tradición de beber vino y, sobre todo, en tres momentos: en el año nuevo chino, en el festival de comercio y barcos y a mediados de otoño.