En Bodegas Ochoa estamos vigilando cada cepa muy de cerca para encontrar el momento perfecto de vendimia. Este año, el calor está provocando un retraso de alrededor de 10 días en la vendimia y una alteración en nuestro orden habitual de variedades.
Las elevadas temperaturas que estamos experimentando provocan que la planta cierre sus estomas y paralice la madurez enólica.
Por suerte, en nuestra viña en Traibuenas contamos con riego, lo que nos permite ayudar a la uva a que continúe con su maduración en algunas variedades como Tempranillo.
Esto trae consigo algo bastante inusual en cuanto al orden de vendimia y es que los Tempranillos se recogerán antes que el Merlot, cuando generalmente el Merlot está listo para ser vendimiado entre una semana y diez días antes que el Tempranillo.
Por otro lado, cabe destacar que este año el Moscatel tiene una calidad fantástica. Las condiciones climatológicas marcadas por las elevadas temperaturas están favoreciendo la pasificación y la concentración de azúcares y acidez.
Así que todo apunta a que va a ser una añada de gran calidad porque además tenemos menos rendimiento, racimos muy sueltos, granos muy pequeños y esto siempre favorece a la calidad de los vinos.
Creo que en esta cosecha hay que prestar especial atención a los vinos elaborados a partir de Merlot, Cabernet, Garnacha y Graciano porque esta madurez tardía favorece la elaboración de unos vinos elegantes y equilibrados.