La Denominación de Origen Tarragona da ya por finalizada su vendimia 2024, y lo hace satisfecha por la calidad obtenida de la uva, aun y la disminución de la cosecha. En total, se han vendimiado alrededor de 1.200.000 kilos de uva, cifra inferior respecto a la cosecha anterior. Como ya pasa en otras zonas de Cataluña, la cosecha 2024 de la DO Tarragona ha estado sometida a unas condiciones especialmente complicadas de climatología y sequía, que se arrastran desde hace unos años. Delante este contexto económico y social complicado que sufre el sector vitivinícola, la DO Tarragona se une a la demanda a la administración del resto de territorios del país para buscar líneas de trabajo con el objetivo de mantener la viabilidad del conreo del viñedo.
La reducción de la producción ha sido consecuencia, fundamentalmente, de las altas temperaturas y de la importante sequía que padece el territorio, especialmente, el Camp de Tarragona. La falta de agua en esta zona ha hecho que las plantaciones viejas estén sufriendo mucho. Por otro lado, en el caso de la Ribera de Ebro, gracias al río y al riego de apoyo, la disminución ha sido un poco menos agravada. Aun así, la calidad de la uva ha sido muy buena de forma generalizada en toda la DO.
En cuanto al estado de maduración de la uva, este año ha sido correcto, aunque la sequía acumulada hace que el grado sea sensiblemente más bajo. La sequía es también la responsable de la ausencia de plagas y enfermedades destacables. Este año, únicamente el mosquito verde ha afectado ligeramente los viñedos a consecuencia de la falta de vegetación espontánea donde poder instalarse. Habrá que estudiar la transcendencia de los daños en las plantaciones afectadas, de cara a la próxima cosecha del año que viene.