LA VENDIMIA ALCANZA SU PUNTO ÁLGIDO ESTA SEMANA EN LA DOP JUMILLA
SE GENERALIZA LA ENTRADA DE UVA MONASTRELL EN LAS BODEGAS DOP JUMILLA
La vendimia en la DOP Jumilla alcanza su máximo
esplendor bien entrados en el mes de septiembre, cuando la Monastrell que se cultiva
en secano alcanza su punto óptimo de maduración en gran parte de la Denominación
de Origen Protegida, fundada en el año 1966.
Como ya se anunció en el pasado mes de agosto, la primera zona en ser
vendimiada fue la parte sur, dónde se empezó con variedades blancas y tintas
tempranas, y fueron sucediéndole el resto de las tintas. Garnacha, Petit Verdot,
Cabernet Sauvignon, Merlot, Garnacha Tintorera, Syrah y como
no, Monastrell son ya protagonistas de este mes de septiembre en sus distintas
elaboraciones. La diversidad de suelos, climas y terruños en la DOP Jumilla induce
a una vendimia que comenzó la segunda semana de agosto, y durará hasta principios
de noviembre, haciendo que la DOP Jumilla tenga una de las vendimias más largas de
Europa.
Pasado el ecuador de la vendimia en Jumilla, los varietales en su mayoría están ya
recolectados y se va a generalizar la vendimia de la Monastrell; en las partes medias de
la DOP Jumilla muchas viñas aguardan su momento la próxima semana, y se espera
que la parte más alta iniciará principalmente la siguiente semana la vendimia de
la Monastrell, mientras van bajando la entrada de las otras variedades en bodega.
Como se preveía la calidad de la uva es buena y está entrando a bodega en
un apto estado sanitario si bien es cierto que se viene anunciando una pequeña
merma en producción respecto al año pasado.
Enoturismo entre viñedos
Durante estos días los municipios que conforman la DOP Jumilla bullen en un ir y venir
de tractores con sus remolques cargados de uva, y ya se puede sentir el aroma de los
primeros mostos fermentando. Septiembre y octubre son meses mágicos en la DOP
Jumilla, para poder conocer de primera mano las labores de vendimia y descubrir cual
es el proceso que sigue la uva dentro de bodega. De hecho, muchas bodegas, inscritas
a la Ruta del vino Jumilla, organizan actividades para todos los públicos en torno a
la vendimia.
A principios de noviembre cuando la vendimia esté terminando en la zona norte de la
DOP Jumilla, ya tendremos vino de aquellas zonas que se comenzaron a vendimiar a
finales de agosto, pero nadie duda que, a partir de esta semana, y hasta el final de la
vendimia la Monastrell es protagonista indiscutible, y principal preocupación de
viticultores y bodegas.
Sobre la Denominación de Origen Protegida Jumilla
La Denominación de Origen Protegida Jumilla posee una tradición vitivinícola que
se remonta a los restos de vitis vinífera – junto a utensilios y restos arqueológicos
hallados en Jumilla originarios del año 3.000 a.C., siendo los más antiguos de Europa.
La zona de producción la delimitan, por un lado, el extremo sureste de la provincia
de Albacete, que incluye los municipios de Montealegre del Castillo, Fuente
Álamo, Ontur, Hellín, Albatana y Tobarra; por el otro, el norte de la provincia de
Murcia, con el municipio de Jumilla. Una zona que se caracteriza por valles de gran
extensión surcados por sierras de hasta 1.380 m. Un total de 22.800 hectáreas de
viñedo, en su mayoría de secano, cultivado en vaso, y ubicado sobre suelos
predominantemente calizos, en altitudes que varían entre los 320 y 900 metros.
El clima de esta zona es continental con influencia del Mediterráneo. Las
escasas precipitaciones que apenas alcanzan los 300 mm al año y las más de 3.000
horas de sol, propician la escasa incidencia de plagas y enfermedades, lo que permite
un alto porcentaje de cultivo ecológico.
En la DOP Jumilla se elaboran cinco clases de vino: tintos, rosados, blancos, dulces
y vinos de licor, y prima la producción de variedades autóctonas. La
uva Monastrell ecológica es la variedad más cultivada en esta Denominación de Origen
Protegida.