Articulos

Los vinos de Miguel Torres en Chile: Las Mulas y Cordillera Carignan

La familia Torres lleva más de 300 años en las viñas y otros 140 produciendo vinos. En Miguel Torres se sabe que para elaborar buenos vinos se necesita dedicación y tiempo y respeto a la naturaleza. Alejados de la presión hacia los resultados económicos, su interés es elaborar vinos de máxima calidad con total confianza en el terruño. Nos cuentan: “En 1979 cuando llegamos a Chile, fuimos la primera viña en utilizar tinas de acero inoxidable para la fermentación de los vinos a temperatura controlada, y uno de los primeros en importar barricas de roble francés para el envejecimiento de los vinos. Hoy continuamos con este mismo espíritu, innovando y desarrollando ideas y proyectos que tienen como finalidad hacer vinos de más calidad y que sobretodo respeten el medio ambiente y a las personas”.

Entre sus líneas encontramos Ícono, de Finca, Santa Digna, Las Mulas y Cordillera. Hoy conocemos a Las Mulas y al exquisito Cordillera Carignan de la marca Cordillera.

Las Mulas
A fines de los años 90, Miguel Torres plantó, en San Luis de Alico, 40 hectáreas de las variedades sauvignon blanc, cabernet sauvignon, carmenère y viognier con el fin de producir vinos orgánicos. Un clima seco cercano a la Cordillera de los Andes provee de un entorno ideal para la viticultura orgánica. De allí surgen Las Mulas, un vino en honor a este animal que junto a gallinas y ocas fertilizan naturalmente los suelos, además de ser depredadores naturales de insectos que atacan las plantas de la vid.
Las Mulas Carmenère es de color cereza oscuro, se caracteriza por aromas delicados a fruta, con algunas notas balsámicas. Es elegante en boca y a la vez, muy goloso. Se aprecian matices de cuero y especias. Un largo final.
El Cabernet Sauvignon Rosé presenta un delicado color cereza. Una nariz fresca con presencia de frutas rojas; paladar intenso y postgusto prolongado.
Las Mulas Sauvignon Blanc, es de aromas intensos donde se destacan las frutas tropicales con notas cítricas y minerales. Su sabor resulta muy fresco, se aprecian las características varietales: pomelo y maracuyá. De largo final.
Por último, mi preferido: Las Mulas Cabernet Sauvignon: intenso color rojo profundo.Mucha fruta roja y especias en nariz dan paso a una boca muy sabrosa, de taninos redondos. Un vino exquisito, de buen cuerpo. Se prolonga en boca con interesante consistencia.

Cordillera Carignan

En el Valle del Maule, situados en el interior de la cordillera costera, unos viñedos conservan algunas de las vides más antiguas del mundo de carignan. Esta variedad, recuperada del olvido, es sin duda uno de los grandes tesoros de Chile.
Aromas de confitura, frutas rojas frescas, especias (destaca la pimienta), tabaco y madera. La crianza en barricas de roble nuevo, durante nueve meses, aporta fondos de vainilla dulce.Complejo, sensual, envolvente. Se destaca su postgusto largo y muy evocador. Elaborado con uvas carignan, merlot y syrah, acompaña muy bien todo tipo de carnes asadas.

Para saber: Obtuvo los siguientes premios: Medalla de Oro Thessaloniki International Wine Competition Grecia 2004 (Cosecha 2000); Medalla de Oro Selections Mondiales (Canadá) 2004 (Cosecha 2000)y Medalla de Oro Thessaloniki Wine Competition Grecia 2003 (Cosecha 2000).

Si desea más información sobre la producción de Miguel Torres, aquí su sitio: http://www.torreschile.com

Patrizia :typeo:
www.leccionesdevino.blogspot.com

“Pan con ojos, queso sin ojos y vino que te salte a los ojos” (Anónimo)

Deja una respuesta