La bodega Pazo de Señorans conmemoro ayer sus 25 años de historia en una jornada a la que asistió una muy amplia representación de la restauración gallega. La celebración consistió en una cata de los vinos de la bodega, destapando alguna añada memorable, seguida de un almuerzo armonizado con los vinos Pazo de Señorans Colección 2011, Pazo de Señorans 2014 y Pazo de Señorans Selección de Añada 2007.
El acto tuvo lugar en agradecimiento a la restauración por el apoyo a los vinos de calidad desde los inicios de Pazo de Señorans.[quote= Marisol Bueno.][/quote] “Sin vosotros no hubiera sido posible llegar a hasta aquí; gracias a todos por transmitir el compromiso de la bodega con el territorio y su apuesta por la variedad albariño”
Pazo de Señorans nació en los años 80’ cuando Marisol Bueno y su marido, Javier Mareque, adquirieron un pazo gallego en el que se cultivaba kiwi y uva de la variedad albariño. En 1989 salió al mercado la primera cosecha de la bodega con 7.000 botellas, alcanzando poco después las 10.000. Actualmente la producción supera las 300.000 botellas anuales distribuidas en cuatro vinos: Sol de Señorans, Pazo de Señorans, Pazo de Señorans Selección de Añada y Pazo de Señorans Colección, la última incorporación. Además de éstos, la bodega elabora también desde 1993 un orujo de albariño y un aguardiente de hierbas.
Uno de los grandes logros de la bodega, fruto de la confianza plena en el potencial de la variedad albariño y de su capacidad para alumbrar blancos de altura mundial, ha sido la crianza con lías en depósito de acero inoxidable. Así, Pazo de Señorans ha conseguido vinos con más cuerpo, estructura y complejidad.
Esta excelencia ha sido posible y ha obtenido el aval de la crítica nacional e internacional gracias al cuidado proceso de elaboración que Pazo de Señorans ha seguido desde los inicios, respetando al máximo la viticultura y empleando un método tradicional en unas instalaciones de última tecnología. Este 2015 estas instalaciones se han ampliado, permitiendo una mayor capacidad de guarda y crianza de los vinos en botella. Se materializa así la apuesta de Pazo de Señorans por el albariño, su gran capacidad de guarda y la confianza de que en Rias Baixas se pueden elaborar grandes vinos blancos de prestigio mundial.