El vino Kosher, es un vino que es apto para los rituales de la religión judía.
El vino kosher debe ser supervisado por una persona cualificada de la religión judía, generalmente un rabino. La supervisión comprende todos los pasos dados en la elaboración de vino, el cuidado de las cepas, el desarrollo y recogida de las uvas, la crianza, el embotellado, etc.
Cuando llega el momento de la vendimia, las uvas deben ser cuidadosamente recogidas y nunca se puede realizar esta acción en fin de semana
Todos los utensilios, la maquinaria o cualquier útil que pueda entrar en contacto con la uva o el mosto deberán haber sido previamente higienizados bajo la mirada de un rabino. En la manipulación de la uva y su prensado, sólo un judío es apto para realizar estas operaciones. En el proceso de vinificación también se deben mantener unas características específicas, esta debe realizarse sólo en cubas de acero inoxidable
la clarificación, debe realizarse solamente con arcilla Bentonita, un tipo de roca en cuya composición se encuentran presentes varios minerales y unas propiedades curiosas, como hincharse al contacto con el líquido, por eso se llama arcilla activada.
Durante el proceso de maduración del vino, sólo un judío puede ver el líquido, por lo que la bodega permanece sellada para que nadie pueda cometer el error de entrar y echar a perder el trabajo por un simple acto.
Las botellas con las que se embotellará el vino Kosher también requieren una especial atención, deben ser botellas nuevas que también han sido supervisadas durante su fabricación
Un vino kosher debe ser abierto por un rabino, de lo contrario ya no sería un “vino sagrado” después puede beber todo el mundo con total tranquilidad.
Por eso muy pocas bodegas españolas hacen este tipo de vino, da igual el tipo de uva, pero estos requisitos que no son pocos, hacen difícil hacerles un vino…
Sin categoría