El Grupo de Viticultura de la Misión Biológica del CSIC, en colaboración con Bodegas Terras Gauda, analizará la concentración de compuestos biosaludables en la uva, la semilla y el vino como consecuencia de la aplicación de manejos de cultivo como el aclareo y el desnietado
Bodegas Terras Gauda abre una nueeva línea de investigación con el objetivo de valorizar el bagazo y obtener el 1º aceite de semillas de uva elaborado con las variedades autóctonas Albariño, Caíño Blanco y Loureiro debido a la constatación de sus componentes biosaludables. La investigación se realiza en el marco del proyecto GALIAT 6+7, impulsado por Terras Gauda, Pazo de Rivas, Olei Aceite Gallego, A Rosaleira, Friscos, Quescrem y siete grupos científicos: Misión Biológica de Galicia-CSIC (Grupo de Viticultura y Brásicas), Instituto de Investigación de Ciencias Marinas-CSIC (Grupo de Química de Productos Marinos), Hospital Clínico de Santiago-CHUS, Aula de Productos Lácteos – USC, Farmacología de la Facultad de Medicina –USC y Química Analítica y Alimentaria de la Universidade de Vigo
Terras Gauda ha destinado para el desarrollo de esta investigación tres parcelas experimentales. En concreto, 2,1 hectáreas de viñedo de Albariño, 5 hectáreas de Caíño Blanco y 2,4 de Loureiro, en las que, siguiendo las prácticas habituales de la bodega, se desarrollarán controles de maduración en las semanas previas a la vendimia. Tras la recogida de la producción, el Grupo de Viticultura de la Misión Biológica del CSIC estudiará las propiedades de las nueve toneladas de bagazo obtenidas. Posteriormente, se procederá a la elaboración de aceites de semillas de vid con cada una de las variedades autóctonas, cuya calidad y beneficios para la salud también serán evaluados por el CSIC.
La segunda vertiente de investigación de Bodegas Terras Gauda en GALIAT 6+7 se centra en el estudio del efecto de la aplicación de dos manejos de cultivo, aclareo y desnietado, en la concentración de compuestos biosaludables presentes en la uva, la semilla y el vino de Albariño, Loureiro y Caíño Blanco. Para ello, se han acotado parcelas experimentales de cada una de las variedades. Un total de 350 cepas son consideradas como control o testigo, mientras que en otras 700 se realiza un aclareo de racimos seleccionando únicamente los de mayor calidad y eliminando aproximadamente el 50% restante.
En el caso del Albariño y debido a su vigorosidad, se aplica también el desnietado (eliminación de la segunda brotación de nietos de la vid) en 350 cepas para conseguir una mayor concentración de nutrientes y una mejor maduración.
Tras la vendimia y una vez en la bodega, el departamento técnico de Terras Gauda procederá a la separación del mosto y del bagazo para su análisis por parte del Grupo de Viticultura de la Misión Biológica del CSIC. Los investigadores estudiarán los parámetros químicos, tanto del mosto como del bagazo y sus semillas; sus niveles de fibra y azúcar y su contenido en proteínas, lípidos y ácidos grasos omega.
Estas dos líneas de investigación se completan con el estudio, en colaboración con el Departamento de Farmacología de la Universidade de Santiago de Compostela, del posible efecto anticancerígeno y antimetastásico de determinadas moléculas de la uva. Por otro lado, se estudiará el efecto cardiosaludable de la dieta atlántica y del consumo de los vinos de Terras Gauda, incluidos en un menú diseñado para 250 familias participantes en este ensayo clínico.
El Grupo Terras Gauda, que desde su fundación en 1989 ha sido pionero en diferentes proyectos de I+D+ i, apuesta, de nuevo, por la innovación como estrategia de crecimiento y diversificación de su proyecto empresarial.