La bodega puso en marcha el pasado año esta iniciativa, que se completó con la instalación de un corazón gigante junto al lago.
Se acerca el día de los enamorados y la bodega valenciana Pago de Tharsys vuelve a repetir la original iniciativa que se inició hace un año, y que ha llevado a cientos parejas de enamorados a visitar la bodega para colocar un candado con su nombre en el corazón gigante y hacerse las mejores promesas de amor arrojando la llave al lago.
La acción se dirige a distintos restaurantes, que reciben junto al cava unas cajitas regalo que acompañarán a la botella del cava Millesimé Blanco y Millesimé Rosé de Pago de Tharsys en la cena de San Valentín. En su interior, pétalos de flores, un candado y una invitación para visitar la bodega. Además, una de cada dieciocho cajitas contiene como regalo una noche de hotel para dos personas, por lo que el brindis puede venir con premio redondo.
A pesar de ser una pequeña bodega familiar, Pago de Tharsys se consolida año tras año como una de las más relevantes de la Comunidad Valenciana, tanto en la elaboración de vinos y cavas de alta calidad como en la difusión de la cultura del vino.
No hay que olvidar que Pago de Tharsys es pionera en presentar iniciativas peculiares, tanto en productos con presentación singular, como la línea de cavas en los que las botellas llevan un colgante de cerámica inspirados en seres mitológicos, así como en la organización de eventos como la Fiesta de la Vendimia Nocturna, donde los invitados son protagonistas y se convierten en vendimiadores para recolectar las variedades Albariño y Godello a la luz de la luna.
