Barcelona ha sido testigo de “Rioja toca las palmas: razón, corazón y ser”, una cata a dos manos, única y sin precedentes, que ha acercado Rioja y Jerez, a través de Bodegas Beronia y Bodegas Tío Pepe.
Bodegas Beronia y Bodegas Tío Pepe, dos bodegas emblemáticas de la Familia de Vinos de González Byass, han unido Rioja y Jerez en la cata: “Rioja toca las palmas: razón, corazón y ser”. La ciudad condal ha sido el escenario donde Matías Calleja, enólogo de Bodegas Beronia, y Antonio Flores, enólogo de Bodegas Tío Pepe, han mostrado la esencia del terroir de estas dos regiones vitivinícolas.
Matías Calleja, embajador de los vinos de Beronia en el mundo, ha iniciado la cata con las añadas históricas de Beronia Gran Reserva 1973, la cosecha fundacional; Beronia Gran Reserva 1982, la añada en la que Beronia pasa formar parte de la Familia de Vinos de González Byass; y Beronia Gran Reserva 1994, año del gran despegue de Beronia. Tras este viaje por el tiempo, ha continuado con Beronia III a.C., la selección que rinde homenaje a los “berones”, los primeros pobladores de La Rioja, y Beronia Viñas Viejas, elaborado a partir de las uvas procedentes de las viñas más viejas de la bodega con motivo de su 40º aniversario.
A continuación, ha tomado el relevo Antonio Flores, la nariz de Bodegas Tío Pepe. Con pasión y poesía, el enólogo ha trasladado el espíritu de Jerez con maravillas enológicas como Los Palmas, que recuperan una tradición de vinos que elaboraba la familia; Tío Pepe en Rama, inspirado en los días en los que el fino se consumía directamente desde la bota; Apóstoles Palo Cortado Muy Viejo V.O.R.S, joya enológica de más de 30 años, y Palo Cortado de Añada 1982, de elaboración muy limitada.
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