En verdad no fue el deleite de una botella Penfords Grange Hemitage, el que ha arruinado la carrera política del Premier de Estado de Nueva Gales del Sur, el más importante, antiguo poblado de la mancomunidad de Australia. La causa de su precipitada renuncia ha sido el perjurio. Tres años ha, al juramentarse en sus funciones, luego de una victoria que construyó peldaño a peldaño durante dieciséis años, entre los presentes que le hicieron llegar figuraba una botella del vino australiano que nunca falta cuando la lista de los caldos más caros y mejores del mundo se reduce a diez, y que difícilmente quede excluido si se limitaa cinco: el…