El Director General de la OIV Federico Castellucci, presidió en París en el día de ayer, una reunión de prensa en la que dió a conocer un anticipo de los últimos informes elaborados por la institución, relativos a la coyuntura vitivinícola mundial del año 2009.España y Argentina son los países con mayor caída en la producción. Chile y Australia incrementaron sus envíos a granel pero resignando precios. Estados Unidos perdió mercado de exportación.
La coyuntura vitivinícola mundial en 2009 – dice el informe distribuído por la OIV – sigue sufriendo el impacto de la crisis económica mundial. En un contexto de reducción global de la demanda, el consumo mundial de vino, estimado en 236,6 millones de hectolitros, prosigue su disminución en 2009, con una disminución de 6,8 millones de hectolitros con relación al año 2008.
La Unión Europea registra una reducción especialmente significativo de su consumo vinícola, tras los retrocesos de la demanda en los más importantes países consumidores (Francia, Italia, España) e importadores (Alemania, el Reino Unido) de Europa. Influidos por la crisis económica, los intercambios mundiales de vinos, con 86,1 millones de hectolitros, registran, por primera vez desde 2000, una caída del 3,6% en 2009 con relación al año anterior.
Entre los más grandes exportadores mundiales, los que ven retroceder sus exportaciones más bajo por efecto de la crisis económica, son: Argentina, Estados Unidos, España y Francia, mientras que Italia, con una subida de sus exportaciones a 18,6 millones de hectolitros, consolida su posición de primer exportador mundial. Lo mismo sucede con Chile y Australia, registrando, en 2009, sus volúmenes records de vinos exportados, gracias a un fuerte aumento de sus exportaciones de vino a granel, en detrimento del precio medio por litro.
“El mercado mundial del vino, ahorrado hasta ahora por la crisis global, señala una regresión en 2009; y esto esencialmente debido a importantes retrocesos de la demanda en los grandes países productores, consumidores e importadores. No obstante, los intercambios internacionales de vinos ha representado una parte importante del consumo mundial de vino en 2009, a saber un 36,4%; lo que significa que se consumieron más de 3 botellas y medio sobre 10 fuera de sus países de producción durante el año 2009”, declaró a Federico Castellucci.
La producción mundial de vino, con 265 millones de hectolitros, retrocede también un 1,4 millón de hectolitros en 2009 y sigue siendo relativamente escasa, como las de 2001, 2003, 2007 y 2008.
Entre los países europeos tradicionalmente productores, España y Alemania registran una reducción no desdeñable. En cambio, Francia realiza el más importante aumento en cuanto a producción vinícola en 2009.
La producción de vino del conjunto del hemisferio meridional, mas los EE.UU y Suiza evoluciona de una manera contrastada en 2009: Chile y los Estados Unidos conocen un aumento importante, mientras que la producción baja en Brasil, Argentina, Sudáfrica y Australia; las producciones suizas y neozelandesas siguen siendo casi idénticos a las de 2008.
Bajo la influencia de la reducción del viñedo de la Unión Europea, la superficie vitícola mundial (7.636.000 hectáreas) disminuye un 1,2% en 2009 con relación a 2008. El viñedo de la UE retrocede, en 2009, un 2,5%, a raíz del nuevo régimen comunitario de abandono definitivo de los viñedos en el marco de la organización común de mercado (0CM). Los países de la UE más involucrados en este retroceso son: España, Italia y Francia
Fuente: Diario del vino