Tiene forma de lingote y está cubierto de chocolate al 70 por ciento de cacao puro. Su apariencia es similar a la de otros turrones anteriores de los maestros pasteleros Damián Ramos y Sebastián Guerrero, de Panadería Ramos de Caleta de Vélez. La verdadera originalidad del turrón está en su interior, ya que contiene sendas ganaches –crema de pastelería que se elabora con chocolate, a la que se le puede añadir otros ingredientes que aporten sabor y textura– de rulo de queso de cabra de raza malagueña y vino Pedro Ximénez de la bodega Cortijo la Fuente de Mollina, y una gianduja de chocolate blanco y nuez pecana ecológica de la empresa…