Fiel a su ambición por crear el mejor champagne del mundo, la Maison presenta un vino como ningún otro, con una complejidad que combina la audacia del Rosé y la longevidad del OEnothèque.
• Veinte años que subliman hasta límites infinitos el estilo Dom Pérignon,consiguiendo un portentoso vino complejo, intenso, vibrante, táctil, sensual…
• Cada una de las escasas botellas disponibles ha sido catada y aprobada, por un enólogo de la maison para certificar su calidad.
En 1668 en la abadía de Hautvillers, el fraile Dom Pierre Pérignon anunciaba a sus hermanos que
“estaban bebiendo estrellas” tras dar por fin con el champagne que llevaría su nombre. Desde entonces,
la Maison no ha perdido esa ambición por conseguir la máxima perfección en todos sus vinos.
Con este objetivo, la maison ha creado el Dom Pérignon Rosé Oenothèque 1992, un champagne que sublima las cualidades del Rosé para llevarlo a su máxima expresión.
Dom Pérignon es siempre un vino de añada que no se crea todo los años, sólo aquellos que han resultado excepcionalmente buenos. Tras siete años se libera con el nombre Vintage, sin embargo,aquellos años que rayan en la perfección consiguen permanecer envejeciendo en la bodega hasta alcanzar la segunda plenitud, llamada Oenothèque, a los 14 años en el caso del Dom Pérignon Oenothèque blanco y 20 años en el caso del Oenothèque Rosé.
Uvas recogidas en 1992 que tras 20 años aparecen ahora para trasladarnos en el tiempo a uno de los
mejores años en la historia de España, con la celebración de los JJOO, la Expo de Sevilla o la Capital
Cultural de Europa para Madrid.
Casi veinte años en bodega que han conferido a Dom Pérignon Rosé OEnothèque 1992 un carácter
íntimo e intrigante, de intensidad radiante, profundidad infinita, tentador y misterioso. La encarnación
máxima de la sensualidad en el paladar. El estilo Dom Pérignon magnificado.
Con una intensidad deslumbrante, cálida opulencia y gran profundidad, se trata de la metamorfosis más
bella del Rosé, una paradoja aún más aguda y afinada. En definitiva, un viaje en el tiempo a donde «todo
es belleza, lujo, calma y voluptuosidad».
Como siempre, Dom Pérignon utiliza las mejores uvas para hacer sus champagnes ya que es la única
marca que tiene el privilegio de acceder a los 17 Grand Crus (los 17 pueblos con uvas de la máxima
calidad) que existen en la Champagne. Uva con 100 puntos de calidad sobre 100 puntos posibles, para
desarrollar el mejor champagne del mundo, a la que se une la uva procedente del Premier Cru mítico de
Hautvillers, el mismo que cultivó el propio Dom Pierre Pérignon y dónde creó el champagne.
Con apenas 5 botellas en España de Dom Pérignon Rosé Oenothèque 1992, cada una de ellas ha sido
probada y aprobada por un experto enólogo de la Maison. Una última etapa antes del lanzamiento del
vino que garantiza su calidad incuestionable.
PVP Recomendado: 1.000 €
