divFuente: a href=”http://www.losandes.com.ar/notas/2012/1/10/prorroga-exencion-espumantes-617450.asp”Diario Los Andes/a/divdivbr //divEl anuncio de la Presidenta de la Nación, de prorrogar la exención impositiva a los espumantes, constituye un reconocimiento al cumplimiento de compromisos y objetivos que el sector de la industria firmó en su momento con el ex primer mandatario, Néstor Kirchner.diva name=’more’/a/divConstituyó sólo un párrafo en el discurso que la Presidenta de la Nación pronunció durante su visita a la inauguración de una champañera en San Rafael. “Vamos a volver a prorrogar la exención impositiva a los espumantes.br / br /Ya hemos comprobado las inversiones en 2010 y ahora vamos a verificar las de 2011 y, una vez verificadas, vamos a hacer la prórroga, porque la sintonía fina va a ser para todos, dar para recibir y recibir para dar. Que el intercambio sea a dos bandas para el pueblo argentino, que es el que verdaderamente invierte cuando hay exención impositiva”, dijo Cristina Fernández.br /br /La decisión de la Presidenta no surge de la casualidad ni de una actitud personal. Es el resultado de la respuesta que la industria de los espumantes locales le dio al acuerdo que en su momento suscribió con el entonces primer mandatario Néstor Kirchner. Fue en febrero de 2005 cuando, junto al sector vitivinícola, establecieron como objetivo impulsar el consumo de vinos espumantes y estimular las inversiones para mejorar la competitividad. br /br /A tal efecto se dispuso que se exceptuaría del pago del impuesto de 12 por ciento a las ventas de champán, tributo que se cobra a otras bebidas -especialmente las denominadas blancas- por considerarlas un bien suntuario.br /br /A cambio del beneficio, la industria se comprometió a invertir un 25 por ciento por encima de lo que se hubiese pagado por ese impuesto a las ventas en reconversión de viñedos a uvas de mejor calidad, incorporación de tecnología, creación de fuentes de trabajo y aumento del consumo y exportaciones de espumantes.br /br /De acuerdo con un informe proporcionado por el Instituto Nacional de Vitivinicultura, encargado de monitorear las inversiones, durante 2010 la venta de vinos espumantes ascendió a 640 millones de pesos, mientras el sector realizó inversiones reales por más de 112 millones, con lo que superó los 77 millones de pesos que hubiera tributado al Estado en concepto de impuesto interno de 12 por ciento a ese tipo de vinos. Las cifras se desprenden de las declaraciones juradas, trimestrales de despachos de vinos y las anuales que corresponden a las inversiones realizadas.br /br /También se indica que las bodegas que se dedican a la elaboración de champán han tenido un notable crecimiento, alcanzando a más de 100 los establecimientos que están en el mercado.br /Lo sucedido con el champán no es más que el fiel reflejo del cambio positivo que ha tenido la vitivinicultura en las últimas décadas. Que transformó una visión cuantitativa en una cualitativa, cambio que respondió a una cuestión de mercado en razón de que en la década de los 70, con 90 litros de consumo per cápita, poco importaba la calidad.br / br /Sin embargo, como consecuencia de una fuerte caída en el consumo la vitivinicultura argentina -y la mendocina en particular- modificó el esquema. Reconvirtió viñedos e incorporó tecnología de punta en bodegas a los efectos de mejorar la calidad y así poder salir a competir con posibilidades en los mercados internacionales. Los resultados son más que claros. Se multiplicaron geométricamente las exportaciones, mientras el consumidor argentino también resultó favorecido por la mejor calidad de los vinos.br /br /El sector del champán se sumó al esfuerzo y el reflejo se da con el crecimiento constante en el consumo interno. En ese marco, la decisión de la Presidenta es un reconocimiento al cumplimiento de los compromisos asumidos por la industria.div class=”blogger-post-footer”img width=’1′ height=’1′ src=’https://blogger.googleusercontent.com/tracker/3326656404244398954-6897538113398779455?l=vinosdesudamerica.blogspot.com’ alt=” //div
