Después de un estudio, publicado a principios de este año, que concluyó que ciertas especies de murciélagos cazan polillas de vid, los productores de vino en Dordogne están instalando cajas de murciélagos alrededor de sus viñedos para alentar a los mamíferos voladores a actuar como un “pesticida” natural.
Enviado por el comité de la industria del vino de Burdeos (CIVB) y llevado a cabo por la liga de protección de animales y aves de la región (LPO Aquitaine), junto con la consultora Eliomys y el Instituto Nacional de Investigación Agrícola (INRA), encontraron que los murciélagos podrían ser utilizados para ayudar a controlar la polilla de la vid en los viñedos.
El estudio encontró que ciertas especies de murciélagos aumentaron su actividad de caza cuando se toparon con la polilla de la vid. Con el fin de garantizar que este comportamiento no se debiera a la presencia de otros insectos además de las polillas de la vid, el estudio evaluó la dieta de los murciélagos y analizó su guano (excremento). Grapevine moth DNA formó un gran componente del guano de murciélago en las áreas de cultivo de vid, incluso cuando se reportaron números relativamente bajos de polillas, encontró el estudio.
El estudio concluyó:
“Por primera vez, estos resultados demuestran formalmente la capacidad de los murciélagos para alimentarse de polillas de vid y polillas cochylis”.
Según lo informado por el Telegraph, los productores de vino en la Dordoña están instalando cajas de murciélagos alrededor de sus viñedos, y las escuelas secundarias locales también ayudan con la iniciativa. Alrededor de 20 dominios vinícolas están involucrados en el esquema con pruebas que se llevarán a cabo en los próximos tres años, según el periódico.
BatViti, como se le conoce, se estableció en 2016 y ha ido cobrando impulso, especialmente a la luz del estudio publicado a principios de este año. El proyecto es parte del esfuerzo de la cámara de agricultura local para reducir significativamente el uso de pesticidas como parte de un proyecto de dos años. Guillaume Barou, vicepresidente de la cooperativa vinícola de Monbazillac, dijo al Telegraph:
“El uso de productos fitosanitarios (pesticidas de uva) es el último recurso para que un agricultor luche contra una amenaza que pone en peligro su cosecha. Si podemos encontrar otras soluciones antes de alcanzar ese umbral, incluso si quedan algunas polillas, eso es perfecto “.
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