Castillo de San Diego responde, cada año, al privilegio de ser el primer vino blanco de Andalucía, pero también a la responsabilidad de ser el vino blanco más vendido de España. Cada cosecha está a la altura del reto que le marcan los consumidores, un compromiso que se reinventa con cada añada y que adquiere unos matices muy especiales cada Navidad, cuando Castillo de San Diego, gracias a esta confianza renovada, se convierte en un invitado más a la mesa de muchos españoles.
Bodegas Barbadillo, pionera en la producción de vino blanco y primera empresa comercializadora de manzanilla, vuelve este año así a cumplir con su compromiso anual de presentar a los consumidores el vino blanco de referencia, que llega a nuestras mesas de la mano de la nueva añada 2012, tan fresca, ligera y satisfactoria como siempre, pero con una imagen distinta, elegante y evocadora.
Si el pasado año la botella se llenó de estrellas doradas de mar, que adornaban así el árbol de Navidad y nos traían los reflejos dorados del sol del verano, en esta ocasión Barbadillo apuesta por ahondar en esa doble condición de Castillo: veraniego y navideño, un vino tan excepcional que es capaz de hacer convivir ambos momentos del año (asociados al descanso y al disfrute de la familia) de una manera natural y coherente.
La nueva estética de Castillo de San Diego parte del recuerdo evocador del mar, por lo que la cubierta de cada botella muestra la arena de una playa desierta, recreando sensaciones cálidas, directamente asociadas al periodo estival. La campaña publicitaria ahonda en esa idea: “Ahora que el rumor de las olas queda lejos y el verano es solo el recuerdo de largos y cálidos días, abre una botella de la cosecha de Castillo de San Diego 2012 y deja que el mar vuelva a ti”.
Según Montserrat Molina, enóloga y directora técnica de Bodega Barbadillo “ Se trata de una cosecha excelente fruto de un cuidado minucioso y de una climatología ideal para las necesidades de la uva. La falta de lluvias de este año ha dado como resultado una cosecha de extraordinaria calidad, redondeada en los últimos días de un verano particularmente largo. La uva, más pequeña de lo habitual, ha aportado riqueza aromática y gustativa a este espléndido vino blanco.”
Da fe de su excelencia su nota de cata. La nueva añada de Castillo de San Diego 2012 nos regala un vino de color amarillo pálido con un gran carácter varietal. En nariz, destacan los aromas a frutas frescas, blancas y carnosas – manzana, pera y notas cítricas – y los recuerdos a flores blancas. En boca es amable, amplio y sabroso.
El lanzamiento de la nueva cosecha se adelanta este año al inicio de las fiestas navideñas, con lo que lo convierten en el perfecto acompañante de comidas, cenas familiares y de empresa. Un vino ligero, sedoso y equilibrado, muy marinero, que acompaña a la perfección pescados y mariscos.
Una caja muy especial
Hay muchos motivos para recibir con alegría la Navidad y el nuevo año de la mano de Castillo de San Diego 2012. Con el renovado diseño de la caja de lujo en que se presenta este año, Bodegas Barbadillo quiere, además, hacer un guiño a los consumidores que saben del carácter fresco y marinero de nuestro vino, a la vez que se muestra aún más atractivo para los que quieran acercarse a Castillo por primera vez.
Si en la campaña de verano, Castillo de San Diego regresó al mar para volver mimetizado con sus habitantes, ahora, en Navidad, sus decoraciones ahondan en esa divertida idea. También en estas fiestas, el mar y su recuerdo es el protagonista. Un envoltorio moderno y divertido, acorde con la frescura y la originalidad del producto que guarda dentro.
Como novedad, tanto las botellas como las cajas incluyen un código Qr, captable con el móvil, que permitirá a los consumidores acceder directamente a la videocata de Castillo de San Diego, el buque insignia de Bodegas Barbadillo, que ya está disponible en Internet en www.youtube.com/barbadilloco.
